El viejo marido ordenó a la maldita esposa

El anciano últimamente no pudo satisfacer a su joven esposa y la niña no lo miró y lo consoló, ella caminó muy triste e insatisfecha. El anciano decidió hacer un regalo a su amado y le pagó a un tipo de prostituta para satisfacer a su esposa. Pero con la condición de que su esposa se folle ante sus ojos. El anciano le dijo a su esposa sobre sus planes y tal regalo. Estaba muy encantada, ya que realmente quería sentir un miembro en su coño. Follando en el sofá como la última vez, la niña recibió orgasmos de un amante experimentado.